Rogelio Ríos

MIRADA AL MUNDO
La atmósfera de violencia en la que todos los mexicanos convivimos no tiene nada de normal, nos carcome lentamente, ¿por qué no reconocemos el problema y lo enfrentamos?


Los debates revelan personalidades de los contendientes: las de Xóchitl y Claudia son perfiles opuestos en lo emocional e intelectual. La de Jorge ha sido una sorpresa para mucha gente.


Al arranque de su gobierno, su voz sonaba firme y retumbaba en las paredes del Salón Tesorería del Palacio Nacional, hoy el cansancio físico y mental es evidente.



No percibo en políticos y futbolistas un sentido de pertenencia a la institución en que militan, de trabajo en equipo ni apego a una ética del deportista o el servidor público.


Que la crisis provocada por AMLO con Ecuador no lo distraiga de los graves problemas sin resolver por su gobierno en nuestro México.


Si los candidatos se enfrascan en una batalla campal, el debate va a resultar completamente predecible, airado e inútil como herramienta de información para los electores.


La lista de atentados y asesinatos a candidatos en campaña, de varios partidos políticos y el abandono de candidaturas crece día a día en tanto los demás candidatos continúan en sus campañas.


Defendamos a nuestra “frágil democracia” (como la nombra José Woldenberg) del autoritarismo del presidente prorruso López Obrador, Morena, y su asalto al régimen democrático.


En México sigue siendo un tabú hablar de la condición física y mental del presidente de la república. Lejos, muy lejos, de los ejemplos de Carlos III y el presidente Biden.


Quiero creer que la democracia en México resistirá el embate autoritario y destructor del actual gobierno morenista, más allá de si el 2 de junio haya alternancia en la presidencia de la república o repita el partido en el poder.


Contenido reciente