"Entro con Mariana al Gobierno. Va a ser un actor clave. Ya me amenazó que va a poner su oficina al lado de la mía", Samuel García frente a su esposa, entrevista publicada el 3 de octubre de 2021 en El Norte.
Sin duda que es de aplaudir que Samuel García Sepúlveda haya incluido mujeres en el gabinete de Nuevo León en posiciones de alta responsabilidad y no solo en posiciones para cumplir con la paridad y lucirse en la foto.
Pero, aunque parezca una estrategia novedosa que el emecista haya pasado a su esposa de la supuesta “figura decorativa” de primera dama, que tenía entre otras funciones la presidencia del DIF, a una posición ejecutiva al frente de una oficina en su despacho, además de oler a nepotismo representa un riesgo operativo.
“El ser presidenta honorífica del DIF es un puesto muy tradicional que se le asigna a la esposa del gobernador, como para darle algo, y yo creo que tengo más capacidad y mucho más que dar”, dijo Mariana Rodríguez en una reunión con los medios de comunicación la semana pasada, “voy a poder trabajar con todas las secretarías de manera universal… Mi oficina va a estar a la par del gobernador”.
El nepotismo está tipificado desde el pasado 19 de noviembre de 2019 a nivel federal en el artículo 63 Bis de la Ley General de Responsabilidades Administrativas Federal, "cometerá nepotismo el servidor público que, valiéndose de las atribuciones o facultades de su empleo, cargo o comisión, directa o indirectamente, designe, nombre o intervenga para que se contrate como personal de confianza, de estructura, de base o por honorarios en el ente público en que ejerza sus funciones, a personas con las que tenga lazos de parentesco por consanguinidad hasta el cuarto grado, de afinidad hasta el segundo grado, o vínculo de matrimonio o concubinato".
En el artículo 3 fracción XXV se menciona a los servidores públicos sujetos a esta Ley: "Las personas que desempeñan un empleo, cargo o comisión en los entes públicos, en el ámbito federal y local, conforme a lo dispuesto en el artículo 108 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos".
Seguramente recordaremos algunos casos de nepotismo, pero el que se haya hecho en el pasado no justifica que se haga ahora, además de que antes no estaba tipificado. El primer caso que me viene a la mente es el de los hermanos Moreira en Coahuila.
Más allá de "heredar" la gubernatura de su hermano, Rubén fue subsecretario de asuntos políticos de la Secretaría de Gobierno de Humberto en los primeros dos años de su sexenio (2005-2007). Pero anticipándose a la acusación de nepotismo, Humberto ya como gobernador electo le pidió a su antecesor Enrique Martínez que moviera a su hermano de la Subsecretario de Planeación Educativa de la Secretaría de Educación Pública (que ocupaba desde 2003) a la subsecretaria que iba a ocupar en su gobierno, de esa manera argumentaron que estaba ahí desde antes que él asumiera y eludieron la responsabilidad.
En su momento el periódico Palabra, del Grupo Reforma, fue el único en señalar esta falta.
Fue tanto el poder que tenía Rubén que muchos aseguraban que desde ahí (y aún después de dejar el cargo) ejercía las funciones de vicegobernador, mientras Humberto era "engañado" por el tesorero Javier Villarreal, actor intelectual y material del Moreirazo, eso dijo el exgobernador por si lo duda.
El caso de Samuel no tiene atenuantes, él creó una oficina específicamente para su esposa en la reorganización que hizo del gobierno estatal aprobada por el Congreso local, pero ella no trabajaba antes en el gobierno estatal, y además él la designa directamente.
La Ley de la Administración Pública del Estado de Nuevo León señala, en el tercer párrafo del artículo 21, que las personas titulares de las Unidades Administrativas del Ejecutivo Estatal (donde Amar a Nuevo León es una de las ocho) serán designadas por la persona titular del Poder Ejecutivo (Samuel García).
Aún falta el reglamento de la operación de la unidad 'Amar a Nuevo León”, pero no deja lugar a dudas que si por alguna razón la Señora García deja el cargo seguramente desaparecería la unidad. En una reunión con la prensa Mariana dijo que estará enfocada en tratar entre otros temas: adopciones en albergues del DIF, niños con discapacidad, violencia obstétrica, embarazo en niñas, adicciones en adolescentes, pequeñas y medianas empresas, protección animal y el rescate del sur de Nuevo León.
Además, no es descartable que desde esa oficina busque posicionarse para un puesto de elección futuro “por si se ofrece”, basta ver el nombre de la unidad aMAR a Nuevo León, que puede ligarse al nombre de su titular y que además ya tiene una marca que explota esas letras, MAR cosmetics.
“Pues no lo descarto (contender por un puesto público), porque la vida me ha puesto en lugares que no pensé tan pronto; si en algún momento lo considero o me lanzo para algo, mientras sea para ayudar y que sea algo que yo quiero y que nadie me imponga, pues lo haremos”, dijo en una entrevista con Milenio.
En la operación del día a día del gabinete puede generar conflictos, tan solo imagine un escenario donde Mariana quiera impulsar (no imponer) un proyecto en un área de gobierno y mover recursos de otros proyectos más importantes en esa área de gobierno... ¿a quién le va a dar la razón Samuel, a su esposa o al secretario?
Cuando sea público el reglamento de Amar a Nuevo León despejará muchas dudas, la principal siendo cómo será la estructura de su gobierno: como lo dejó entrever Samuel el 27 de septiembre, "el gobernador junto con la oficina Amar a Nuevo León, auxiliado por siete unidades administrativas, con un gabinete super estructurado" o como lo dijo Mariana a la prensa "mi oficina va a estar a la par del gobernador". ¿Será un cogobierno o solo una unidad de apoyo a las funciones del gobernador?
Lo preocupante no es el posible nepotismo, ni que las funciones de gobernador sean compartidas con su esposa, lo preocupante es el silencio de la sociedad, pasando por las organizaciones civiles, los partidos y los medios, y el mal precedente que creará para la contralora entrante que dejará pasar este asunto.
Como diría el clásico no hagas cosas buenas que parezcan malas o pero aún… no hagas cosas malas que parezcan buenas.
¡Hasta la próxima semana!