Durante varios siglos hemos vivido bajo el paradigma de que el ser humano es, en esencia, un ser eminentemente racional, cuyas decisiones se basan, precisamente, en la raz贸n y no en la fe o la intuici贸n, menos en la sinraz贸n.
Ello, desmentido una y otra vez por la realidad, no obsta para que continuemos pensando que hacemos aquello que es mejor para nosotros desde un punto de vista l贸gico.
Somos, seg煤n ese paradigma, una mente envuelta en un cuerpo y no un cuerpo que incluye un cerebro que funciona seg煤n las leyes de la naturaleza y no de la l贸gica.
Precisamente bajo ese supuesto trabajan muchos pol铆ticos de la actualidad, los cuales creen que mostrar hechos y cifras resulta suficiente para convencer a otros de que est谩n en un error, que si la realidad dice que este es el sexenio con el mayor n煤mero de muertes violentas, que si es el de menos crecimiento en lo que va del siglo, que si empeor贸 el sistema de salud, que si no supo responder ante la pandemia鈥 y as铆 podr铆amos continuar enumerando razones para 鈥渃onvencer鈥 a los otros de que est谩n equivocados en la forma en que perciben el mundo, y al final de cuentas muchos siguen pensando que AMLO es un buen presidente.
Para desgracia nuestra, el pensamiento racional es solo una forma en que el ser humano responde ante la realidad, de hecho, es la forma en que m谩s esfuerzo le cuesta responder, tal y como lo se帽ala Daniel Kahneman en su libro 鈥淧ensar r谩pido, pensar despacio鈥.
Para efectos de energ铆a gastada por el cuerpo, el pensar de forma racional es muy 鈥渃aro鈥, gasta tanta energ铆a que nuestro cuerpo se maneja con un 鈥渆quipo de vigilancia鈥, de 铆ndole biol贸gica, que m谩s que pensar act煤a, es el llamado cerebro reptil, la parte m谩s primitiva de este.
Como tambi茅n lo se帽ala Mlodinov, para cuando tomas una decisi贸n racional, tu cuerpo ya eligi贸, ya te indic贸 cu谩l es, para su supervivencia, la mejor opci贸n, a煤n cuando, en t茅rminos racionales no lo sea.
As铆 pues, cuando en una campa帽a pol铆tica se nos invita a pensar, a actuar racionalmente, cuando enfrente est谩n dirigi茅ndose a nuestro cerebro m谩s primitivo, 驴qui茅n cree usted que lleva las de ganar?
Quiz谩 en el plano deontol贸gico, en lo que deber铆a ser, lo mejor sea comportarse de manera racional, como lo se帽ala Jaques Rogozinski en su libro 鈥溌縔 ahora pa麓d贸nde?鈥 en el cual dice que 鈥渆s muy extra帽o el mundo cuando nos creemos todo lo que nos cuentan鈥, tanto como las teor铆as conspirativas, 驴conspiran贸icas?, que nos venden hasta disfrazadas de ciencia, por ejemplo, Naomi Klein o el dise帽o inteligente.
S铆, quiz谩 ser铆a mejor ser racional en un mundo en el cual los nuevos medios de comunicaci贸n transmiten informaci贸n a un ritmo que no permiten a nuestro cerebro procesarla, pero en una etapa de lo que podr铆amos llamar 鈥渃risis de informaci贸n鈥, digamos durante un proceso electoral, no hay tiempo para ello.
Quien quiera ganar s铆 o s铆 una elecci贸n, tiene que ponerse a contar historias, as铆 sean tan descabelladas como la que nos cuenta Umberto Eco en su 鈥淣煤mero Cero鈥濃 y en esas estamos.
