El asesinato de dos cercanos colaboradores de la jefa de gobierno de la CDMX, Clara Brugada, es un claro mensaje para esta, al menos en eso coinciden la mayorÃa de los analistas polÃticos, pese a que algunos quieren desviar la atención hacia la presidencia de la república y Omar GarcÃa Harfuch como destinatarios.
Pensar de esta forma implica un muy rebuscado esquema de pensamiento, casi rocambolesco, para llegar a la conclusión de que son la presidenta Sheinbaum y su secretario GarcÃa Harfuch, los destinatarios de un mensaje de este tipo.
El ataque con resultados mortales en contra de Ximena Guzmán y José Muñoz es, por supuesto, un mensaje, pero para su jefa inmediata, Clara Brugada, quien se encuentra desde ya en plena campaña presidencial rumbo al 2030.
El hecho de que se realizara el dÃa de la semana en que se presentan los resultados del combate a la inseguridad y a una hora conveniente para que repercutiera en la mañanera, no implica que el mensaje sea para la presidenta, sino que se le querÃa dar una relevancia y una exposición para que no pasara desapercibido o se quisiera minimizar.
Me parece que el punto no es a quién va destinado el mensaje, demasiado claro y fuerte como para no saberlo, sino ¿de parte de quién? y más importante todavÃa ¿por qué?
Aunque algunos han querido ligar o equiparar el atentado mortal contra Ximena y Pepe, como los nombró la propia jefa de gobierno, con el sufrido hace algunos años por GarcÃa Harfuch, no puede, desde mi perspectiva, comparárseles.
Debido a su trabajo OGH puede golpear algunos intereses de grupos ligados al crimen organizado, el atentado contra él puede ser considerado hasta cierto punto normal, no asà el que la secretaria particular y el coordinador de asesores, cargos eminentemente polÃticos, sean atacados a balazos con las consecuencias ya conocidas.
En ese contexto, el que un grupo del crimen organizado haya atentado con éxito contra la vida de dos personas con cargos polÃticos lleva a la pregunta inevitable de ¿por qué?, ¿se incumplieron acuerdos? o, ¿acaso las disputas entre grupos del crimen organizado son de tal magnitud que se sienten la necesidad de marcar territorios?
Resulta difÃcil saberlo a estas alturas de las investigaciones y cualquier interpretación que se presente en estos momentos es fruto de la interpretación o de la especulación.
Sin embargo, y dado el perfil de los asesinados, parece probable adelantar una hipótesis de otro tipo, que el mensaje no provenga del crimen organizado sino de algún grupo polÃtico que, al igual que muchos, ve que Brugada trabaja con miras a las elecciones presidenciales del 2030 y le están diciendo que no se acelere.
A como se han presentado las cosas en los más recientes procesos electorales no serÃa nada raro que haya quien desee decirle a la jefa de gobierno que desacelere su paso o que de plano se haga a un lado a través de un mensaje violento, como lo han recibido muchos candidatos en los últimos tiempos.
Y por si hay alguna duda, no me refiero a la oposición casi inexistente, sino a grupos polÃticos ligados o pertenecientes al propio partido hegemónico. Es una hipótesis, pero es cuestión de tiempo para que lo sepamos.