Las encuestas suelen tomar un lugar central en la discusión pública durante las campañas electorales, y ya no falta mucho para 2024. Por eso vale la pena hacer un chequeo de la credibilidad y el interés que la ciudadanía deposita en las encuestas hoy en día.
A las encuestas se les dan varios usos políticos: sirven como base para la toma de decisiones y para el diseño de estrategias y mensajes; también se les usa actualmente para seleccionar candidatos o candidatas a puestos de elección popular. Entre los usos políticos también está el llamado cherry-picking polls, o la práctica de seleccionar cuidadosamente y a conveniencia resultados de encuestas: las y los políticos tienden a elogiar y a integrar a su propaganda las encuestas que les favorecen y a descalificar las que les son desfavorables.
Para los medios de comunicación, las encuestas son una parte importante de la cobertura informativa en tiempos electorales, ya que éstas ofrecen a sus lectores y audiencias las tendencias de intención de voto rumbo a una elección, así como otras temáticas relevantes entre la opinión pública, como la aprobación al gobierno en turno, así como las preocupaciones y problemáticas del electorado.
¿Cuánto confía la sociedad mexicana en las encuestas hoy en día? ¿Cuál es su nivel de credibilidad y de interés rumbo a las elecciones de 2024?
En la encuesta nacional de El Financiero del 30 y 31 de marzo incluimos algunas preguntas al respecto. Podría decirse que hicimos una encuesta sobre las encuestas. Permítame compartir y discutir los resultados.
Al preguntar a las personas cuánto confían en las encuestas de opinión pública, 59 por ciento respondió que confía mucho o algo, mientras que 39 por ciento dijo confiar poco o nada. Se trata de un nivel de confianza mayoritario que, para quienes nos dedicamos a la profesión demoscópica, son buenas noticias. A pesar de las controversias a las que son o han sido sujetas en distintos momentos, las encuestas gozan de una confianza mayoritaria actualmente.
Además, las encuestas le interesan a la mayoría de la población, particularmente las electorales. Al preguntar cuánto le interesan los resultados de encuestas sobre intención de voto durante las campañas, una mayoría de 53 por ciento de personas entrevistadas dijo que le interesan mucho o algo, mientras que 47 por ciento dijo que le interesan poco o nada.
La encuesta que hicimos revela que la opinión o reputación de las encuestas varía según su uso u objetivos. Las encuestas con mejor reputación son las encuestas periodísticas o noticiosas que informan al público sobre lo que opina la gente acerca de diversas temáticas. El 67 por ciento expresó una opinión favorable de las encuestas noticiosas.
Las encuestas como herramientas para la toma de decisiones de gobiernos y empresas cuentan 58 por ciento de opinión positiva.
Por su parte, las encuestas como método para seleccionar candidaturas a puestos de elección popular registraron 50 por ciento de opiniones favorables; bastante bueno, considerando que apenas en febrero mostramos los resultados de una encuesta nacional en la que 44 por ciento de la gente prefiere una elección interna abierta para seleccionar candidaturas presidenciales, 18 por ciento opta por una elección entre militantes y sólo 10 por ciento prefiere la encuesta como método de selección.
Me sorprendió que las encuestas como métodos científicos para la investigación académica tuvieran apenas 49 por ciento de opinión positiva; yo esperaba ver una mayor reputación de las encuestas en la investigación académica, pero por alguna razón salieron un poco castigadas, desde mi punto de vista.
Al fondo de la tabla aparecen las encuestas como recursos de propaganda política, con 39 por ciento de opinión positiva y 29 por ciento negativa. Cuando los políticos usan los resultados de encuestas como propaganda, a la ciudadanía no le gusta tanto, aunque aun el uso propagandístico genera casi cuatro de cada diez personas a favor, lo cual refleja la base partidaria en el país.
El presidente López Obrador suele presumir encuestas que lo presentan como el segundo presidente más popular entre varios mandatarios del mundo, pero este uso estratégico/propagandístico de los sondeos no es exclusivo de AMLO. Basta mirar los tuits u otros posteos de las figuras presidenciables de todos los partidos en las diversas redes sociales cuando las encuestas les favorecen.
Las encuestas gozan de una confianza ciudadana mayoritaria hoy en día. Trataremos de dar seguimiento a cómo se desarrolla esa confianza rumbo a los comicios de 2024.