Opinar es un aspecto natural de la discusi贸n pol铆tica; y poder opinar libremente es crucial para una vida democr谩tica. Las opiniones son el objeto de estudio de las encuestas de opini贸n p煤blica, pero las podemos encontrar de diversas maneras y a trav茅s de distintos medios. Basta asomarse a las redes sociales para ver el flujo vibrante de opiniones sobre b谩sicamente cualquier cosa, o formar parte de grupos en WhatsApp para sentirse en ambientes altamente opinionated.
驴Cree usted que todas esas opiniones reflejan lo que la gente realmente piensa? El estudio Latinobar贸metro 2020 incluy贸 una pregunta que capta las percepciones de las sociedades latinoamericanas acerca de si la gente expresa o no opiniones que reflejan su forma de pensar. El fraseo de la pregunta fue el siguiente: 鈥淐uando a las personas se les pide que expresen su opini贸n pol铆tica, 驴cree usted que la mayor铆a dice lo que piensa o cree que normalmente no dice lo que realmente piensa?鈥
El estudio arroja unos resultados que pueden parecer sorprendentes. La mayor铆a de la gente no cree que se expresen opiniones que reflejen lo que realmente se piensa. El 27 por ciento de latinoamericanos dijo que s铆, que la gente normalmente dice lo que piensa, mientras que el 67 por ciento dijo que no. Chile y Argentina son los pa铆ses con m谩s altos porcentajes de creencia en que s铆 se expresa lo que realmente se piensa, con 45 y 40 por ciento. Pero en los otros 16 pa铆ses del estudio, entre 59 y 77 por ciento cree que las opiniones de la gente no reflejan realmente lo que piensan. En M茅xico, las proporciones son 25 por ciento que cree que la gente s铆 dice lo que piensa y 71 por ciento que cree que no dice lo que realmente piensa. Da curiosidad saber por qu茅 impera esta percepci贸n.
Como encuestador, uno espera que la gente nos comparta sus opiniones y formas de sentir. Pero s铆 es factible que no expresen lo que realmente piensan. Una posibilidad es que no se tenga una opini贸n formada sobre alg煤n tema en particular, o sobre varios temas, de manera que cuando alguien nos pregunta nuestra opini贸n simplemente damos una respuesta al vuelo, on the fly, para emplear el t茅rmino del polit贸logo norteamericano John Zaller. Una respuesta al vuelo no deja de ser una opini贸n expresada, pero, a diferencia de una opini贸n bien formada y cristalizada, la respuesta al vuelo puede ser inestable y superficial. El polit贸logo Philip Converse hablaba de non-attitudes, algo as铆 como ausencia de actitudes u opiniones.
Otra posibilidad es que las personas no sientan completa confianza o no se sientan en libertad de expresar lo que realmente opinan, por lo cual deciden guardarse su opini贸n o expresarla de una forma que no parezca confrontacional. La encuestadora alemana Elisabeth Noelle-Neuman propuso una teor铆a de espiral del silencio para describir las situaciones en las que la gente, por temor al aislamiento social o represalias, opta por no manifestar sus opiniones, principalmente en contextos que perciben adversos, y particularmente cuando creen que su punto de vista es minoritario.
Bajo esas condiciones, sin embargo, la respuesta no siempre es el silencio. Puede darse una respuesta que es socialmente aceptada de acuerdo con el contexto en el que se encuentra la persona. Este fen贸meno es el que conocemos como el sesgo de deseabilidad social, el cual sostiene que las personas pueden ajustar sus opiniones a la normatividad social percibida en un contexto dado. Es como una especie de m谩scara, o una estrategia para evitar confrontaciones. No obstante, una respuesta socialmente aceptable no necesariamente es lo que la persona realmente piensa.
Cualquiera que sea la raz贸n por la que algunas personas expresen opiniones que no reflejan lo que realmente piensan, resulta interesante el fen贸meno de la inexpresi贸n. 驴Le quita eso la seriedad a las opiniones que escuchamos o leemos? Si impera la idea de que no son formas de pensar aut茅nticas o reales, 驴puede haber respeto a lo que opina el otro?
Es un tema complicado: en una era de fake news no est谩 ausente la idea de fake opinions. Pero es un tema importante. La expresi贸n de opiniones es la esencia de la discusi贸n y la deliberaci贸n pol铆tica. Y tomar en serio la opini贸n de otros es central en nuestra convivencia democr谩tica. Es posible que en nuestro aprendizaje democr谩tico tengamos dos tareas pendientes: reconocer y respetar la opini贸n de otros, por opuesta que nos parezca, pero tambi茅n saber plantear nuestras propias opiniones y expresarlas adecuadamente, aunque vayan en contra de la mayor铆a. Por lo pronto, comencemos conjugando el verbo opinar.