“Gloria de Dios es ocultar un asunto, y gloria de los reyes es el investigarloâ€, Proverbios, 25:2.
La semana, que en los mentideros polÃticos ha estado repartida entre la expectación por las posibles repercusiones que pudiera tener “El rey del cashâ€, y la repentina y agresiva locuacidad del Secretario de Gobernación, ha estado más que interesante. En los datos recogidos el lunes por SABA Consultores, caben diversas interpretaciones al respecto. Vaya por delante que, como a veces sucede, la opinión publicada diverge en esta ocasión de la opinión pública, ya que en el “Top of mind†que refleja la atención que han prestado los ciudadanos, no se menciona ni a Guacamaya ni al polémico libro de Elena Chávez. Dicho indicador está totalmente dominado por cuestiones relacionadas con la inseguridad y la violencia, a la mayor gloria de Adán Augusto López, responsable último de tales cuitas.
Sin embargo, el operador de confianza de AMLO ha optado en esta ocasión por ejercer su cargo a la antigua usanza, es decir, en términos taurinos, entrando al quite para conjurarle peligros al matador, que en este caso serÃa Andrés Manuel. Esta reacción es sÃntoma de preocupación en los salones de palacio, pues durante unos dÃas pareció irse de las manos la preciadÃsima agenda polÃtica, eso que cada mañana dicta el sumo sacerdote desde su púlpito. Y lo ha conseguido a medias. Ciertamente, no se ha producido un hundimiento del Presidente, pero también queda claro que sus datos de aprobación reflejan una leve, pero muy sostenida a lo largo de las últimas semanas, tendencia a la baja. No se resiente aún en las calificaciones, donde se refrenan los avisos negativos previos. Pero su partido roza la advertencia negativa en identificación, y repite un aviso del mismo signo en intención de voto. Al mismo tiempo que se produce un fenómeno habitual: cuando Morena se deteriora se engrosa el grupo de los desencantados. Sucede en el rubro partidista, sucede en intención de voto, e incluso se refleja en las preferencias sobre el candidato de Morena, donde también aumenta el número de quienes no se inclinarÃan por ninguno. Todo ello, probablemente, en relación con los numerosos avisos negativos que indican un descenso en el interés por la polÃtica en las últimas semanas.
Este desencanto soterrado se manifiesta con más viveza a nivel partidista, pero la tendencia al desgaste del Presidente es un hecho, que igual desde su entorno cercano están infravalorando. Craso error. Cuentan que el dÃa que se firmó la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, el rey Jorge III anotó en su diario la siguiente frase: “Hoy no pasó nada importanteâ€. Es una ironÃa histórica, pues en aquel tiempo el rey de Inglaterra no tenÃa manera de saber, al instante, lo que pasaba al otro lado del Atlántico, pero desde luego sà disponÃa de elementos para verlo venir. El descenso en la aprobación de AMLO está actuando al modo de la gota china, y lo peor que puede hacer el Presidente es ignorarlo. Claro está que sus seguidores más contumaces, que no son pocos, seguirán un tiempo actuando como si no pasara nada. Hablábamos hace pocos dÃas de la patológica vinculación con la Historia que pretenden todos los autócratas mesiánicos. Creen y han de hacer creer que siempre están en el lado correcto de la historia, generando una suerte de mito tribal: sus gobiernos no son ni pueden ser como los de los demás, han de ser los más virtuosos, excepcionales y extraordinarios. Solo que hace tiempo que el mito se sostiene a base de dádivas, y confundir la fe con la transacción comercial es un error de bulto. El desdichado rey Jorge no vio lo que pasaba por dejadez o lejanÃa. La 4T no tiene más excusa que la soberbia. Quizá lo que les suceda sea lo que dijo Ortega y Gasset: ya sabemos lo que nos pasa, y eso es precisamente lo que nos pasa.
El descenso en la aprobación de AMLO está actuando al modo de la gota china, y lo peor que puede hacer el Presidente es ignorarlo.
20/10/2022