La república, donde “el poder está limitado a las funciones que le corresponden a cada órgano y los cargos tienen un plazo determinado”.
En México, por si ya se les olvidó a algunos, el poder reside en tres figuras, el ejecutivo, el legislativo y el judicial. (Aunque hoy gobierne el poder Militar)
Pocos mexicanos, desgraciadamente conocemos de fondo cual es el comportamiento específico de cada uno de los poderes, solo sabemos que existen y ya, es infrecuente que el mexicano promedio sepa para qué sirve la Suprema Corte de Justicia, o las cámaras, o las obligaciones y limitaciones de quien ejerce el ejecutivo. Y las personas cuando no saben, pues creen, en las mentiras que el ejecutivo repite un día sí y los demás también.
Sabemos que tanto el poder Ejecutivo y el Legislativo, han aprovechado esas posiciones para enriquecerse por generaciones.
El poder Judicial, siempre se coció aparte.
En una democracia sana es natural que los poderes se confronten, se cuestionen, pues para eso existen, lo que no se vale es hacerlo a través de calumnias, de mentiras viles, porque eso ya no es sano, ya es otra cosa.
Lo que sucede con el poder judicial en estos días, el querer quitarles fideicomisos, ha hecho que los trabajadores salgan a manifestarse en diversos puntos del país, pues los fondos que quiere confiscar el gobierno, son parte de las prestaciones laborales de los empleados del poder judicial.
El monto que pretende confiscar a los trabajadores ronda los 15 mil mdp, la verdad un monto que, para el gobierno de México es poco menos que una migaja, no es nada.
Ahí se ve que el asunto no va por ahí, que más bien corresponde a un burdo ataque de venganza por parte del ejecutivo, donde se exhibe una vez más la impotencia y la incapacidad de quien hoy ocupa la silla.
Un ataque así se veía venir, solo tuvo que espera luz verde, a que le dijeran donde podría encajar la mandíbula para golpear al poder Judicial, aunque sea con mentiras o con verdades.
¿Por qué no habla el presidente del casi un millón de pesos mensuales que se embolsa el presidente del Senado?
Germán Martínez Cazáres, ex panista, ex morenista y ahora Senador “Plural”, dijo en tribuna que su ex compañero, el morenista Alejandro Armenta recibía cerca de un millón de pesos como presidente de la Mesa Directiva del Senado, a través de diferentes rubros.
“En total, el señor presidente anterior de la Mesa Directiva ganaba al mes 927 mil pesos”, dijo.
Germán expuso que Armenta recibía un salario mensual aproximado de 120 mil pesos, más 130 mil de apoyos a asesores, más otros 206 mil en subvención del grupo parlamentario, 132 mil en subvenciones variables en especies, 200 mil más en asesores y 140 mil en gastos inherentes al cargo.
Eso vale como tres o cuatro ministros ¿o no?
Entonces está claro de donde y como viene el golpe para desaparecer 13 de los 14 fideicomisos del poder judicial, que curiosamente, cuando tenían a Záldivar, el gobierno no se interesó. ¿Será porque ya se siente el rey de Bucarelli?
Pero será una venganza o es que por ahí se está cocinando algo, pues le está dando su “calentadita” con rumbo a las elecciones del próximo año, pues como a los consejeros del INE, los ministros serán posicionados como los enemigos del pueblo pobre, sabio y bueno, los ministros serán los fifís, los privilegiados, los corruptos, etc.
Así que el plan cierra la pinza cuando luego de todos estos dimes y diretes el asunto terminará por caer en la Corte donde si pierde, pues que bueno se lo merecían y si ganan, pues era obvio, pues ellos mismos son quienes cuidan sus privilegios. Así de macabro está el plan.
Una trampa donde no hay escapatoria para el poder Judicial.
El pretexto es la austeridad, ¿cuando se acaba de adquirir una deuda por más de 2 billones de pesos y va como perro rabioso por 15 mil mdp?
El otro pretexto es la vieja confiable de que los fideicomisos representan corrupción, pero aquí le preguntamos ¿Dónde esta el dinero de los 175 fideicomisos que desaparecieron? Eso si suman medio Billón de pesos y no han comprobado corrupción en ninguno de ellos.
Y el otro ataque es porque según el régimen, el poder judicial no regresa a las arcas los subejercicios presupuestales, lo cual es mentira a todas luces pues las cuentas son de acceso público y no los hay.
Y otro más es que con la eliminación de los fideicomisos se atacan los privilegios de los de arriba.
También es mentira pues los fideicomisos abarcan desde ahorros voluntarios hasta prestaciones como salud, vivienda, retiro.
Y como era de esperarse, los trabajadores protestaron esta nueva ocurrencia del gobierno y obviamente los tundieron.
“Es lamentable que se estén manifestando. Es injusto defender privilegios, es pecado social”.
Tener jueces independientes es un derecho necesario para la sociedad, atentar contra ello es atentar contra la población.
Y los partidos políticos calladitos se ven más bonitos, pues hasta hoy no he visto alguno que salga a defender esto que quiere hacer el gobierno con el poder Judicial. No hacen nada y cada vez están mas fuera de la jugada.
Y en resumen, los derechos de los trabajadores son universales y nadie tiene derecho de pisotearlos, la lucha de los derechos de los trabajadores es legítima, inclusos si se trata de luchar contra quienes se supone debieran defenderlo.
Tiempo al tiempo