Durante los primeros tres meses de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, las encuestas registraron un fen贸meno de convergencia partidaria en el respaldo popular, acaso un efecto de despolarizaci贸n. Me explico.
De acuerdo con la encuesta nacional de EL FINANCIERO, publicada el pasado martes 6 de enero, el nivel de aprobaci贸n ciudadana a la Presidenta fue de 78 por ciento en diciembre, 9 puntos m谩s que en el mes previo y 8 m谩s que el 70 por ciento inicial del mes de octubre, seg煤n la serie de sondeos de este diario.
Al arranque de su gesti贸n, en el mes de octubre, la Presidenta contaba con el apoyo casi absoluto de quienes simpatizan con su partido (96%), as铆 como con una mayor铆a entre las personas apartidistas (60%), pero con solamente una quinta parte del apoyo de las oposicionistas (21%). Un escenario un tanto polarizado en torno a las l铆neas partidarias.
Para diciembre, sin embargo, el respaldo a la Presidenta creci贸 entre apartidistas y se duplic贸 entre oposicionistas, en lo que parece un efecto de despolarizaci贸n que nos lleva a plantear un escenario de genuina luna de miel.
驴Qu茅 produjo este efecto despolarizante, si acaso lo podemos llamar as铆?
Pueden ser varias cosas, pero entre ellas podemos listar por lo menos tres: las expectativas que ha generado la Presidenta, el factor Trump y el optimismo que prevalece entre la opini贸n p煤blica hacia adelante.
Las expectativas que ha generado la Presidenta son bastante favorables: de acuerdo con la encuesta publicada el lunes en estas p谩ginas, 36 por ciento de las personas entrevistadas dijo que el gobierno de Sheinbaum hasta ahora ha sido mejor de lo que esperaban, y 42 por ciento lo describi贸 como 鈥渏usto como lo esperaban鈥. Solamente 16 por ciento lo describi贸 por debajo de sus expectativas.
Quiz谩 no sea la regla para todas las personas que no simpatizan con la 鈥4T鈥, pero, como sugiere el sondeo, no es raro escuchar a oposicionistas decir que le dan el beneficio de la duda a Sheinbaum.
Por otro lado est谩 el factor Trump. En un contexto pol铆ticamente polarizado como el mexicano hasta 2024, Trump parece ser un factor que lleva a cerrar filas en torno al gobierno nacional. Ya la Presidenta est谩 dando se帽ales de ello, respondiendo a las declaraciones del republicano relativas a los aranceles, a la deportaci贸n y, m谩s recientemente, a la provocaci贸n de cambiar el nombre del golfo de M茅xico. M谩s lo que se acumule.
Trump, quien tomar谩 posesi贸n como presidente de Estados Unidos el 20 de enero, ha sido descrito como un factor de incertidumbre, acaso de amenaza, que, no obstante, abre la oportunidad al gobierno de Sheinbaum para construir una narrativa de unidad nacional.
Quiz谩s el efecto despolarizante entre los grupos partidarios que se observ贸 en diciembre tenga un poco que ver con eso. De ser as铆, podr铆a extenderse m谩s all谩 de la denominada luna de miel, y se pudiera convertir en un factor de unidad ante el l铆der del pa铆s vecino, sumando a tirios y troyanos.
Hay quien piensa que Trump es un contrapeso a la 鈥4T鈥, y quiz谩 por ello la oposici贸n podr铆a subirse al vag贸n del trumpismo. Si vemos las encuestas, sin embargo, esa parece una estrategia potencialmente costosa en t茅rminos de apoyo popular.
Habr谩 que dar seguimiento y ver c贸mo evoluciona todo, pero es muy probable que la presidenta Sheinbaum cuente en estos momentos con la ventaja del rally round the flag, la tendencia de la gente a cerrar filas en torno a su l铆der ante amenazas del exterior.
El tercer aspecto mencionado tiene que ver con un impresionante optimismo que las encuestas est谩n documentando entre la poblaci贸n mexicana hacia adelante, especialmente en el rubro econ贸mico.
De acuerdo con la encuesta que public贸 EL FINANCIERO el pasado jueves 2 de enero, 87 por ciento de las personas entrevistadas dijo que este a帽o ser谩 muy bueno o bueno, una cifra r茅cord en lo que va de la d茅cada, mientras que 66 por ciento dio la misma respuesta respecto a las expectativas econ贸micas, tambi茅n un r茅cord.
Lo m谩s interesante es que ese optimismo se expresa a trav茅s de l铆neas partidarias: tanto morenistas como oposicionistas, as铆 como apartidistas, expresan optimismo en proporciones mayoritarias. El optimismo actual tambi茅n parece ser un factor de unidad.
Sean estas u otras las razones para entender el fen贸meno descrito, las encuestas muestran que en los primeros tres meses de gesti贸n gubernamental hubo un patr贸n de despolarizaci贸n. Ya veremos si contin煤a o no.
