El pacto de dominación

Adolfo González

EL SEXTANTE
Se ha sustituido el desarrollo del Estado y las instituciones, por un simple intercambio de reciprocidades a través de redes clientelares, que garantizan el voto por Morena a cambio de dádivas.
12/11/2021

“Qui non intelligit, aut taceat, aut discat. (Quien no lo comprenda, que calle o que aprenda)”, John Dee.
 

AMLO vuelve a vivir momentos de amor con la opinión pública. Los datos de la medición de SABA Consultores del pasado día 8 refrendan plenamente la tendencia de la semana anterior. El Presidente recibe aviso favorable en aprobación, y, lo que es más importante, marca valor récord en calificación media y hace lo propio en calificaciones altas. Paralelamente, su partido confirma su recuperación repitiendo alerta positiva tanto en identificación como en intención de voto. Los grupos que favorecen estas variaciones son los habituales: pocos estudios, pocos ingresos, jubilados o de más de 68 años, especialmente en el caso de los avisos en las categorías partidistas. La interminable luna de miel parece haber regresado.
 
En cuanto a los estratos, sólo hay una presencia que se sale de esas pautas, pero en el indicador de preferencias para el próximo inquilino del Palacio Nacional. Marcelo Ebrard sigue siendo el favorito de la clase media, el mal menor del que hablábamos la pasada semana. Es posible que entre lo que hay para elegir así sea, aunque su área de responsabilidad esté protagonizando esta semana un lamentable espectáculo en los consulados, dejando a cientos de mexicanos residentes en el extranjero sin la renovación de su pasaporte por una cuestión burocrática. Esto es más que probable que no lo vean en las noticias, pero si tienen algún familiar fuera de México en ese trance, se lo podrá confirmar. Esperemos que don Marcelo se haga cargo de la situación, y practique la buena gestión para el caso de que llegue a ejercerla en más altas instancias.
 
Por lo demás, en el asunto de la sucesión, Claudia Sheinbaum recibe también un aviso favorable, pero no le alcanza aún para igualar en preferencias con Ebrard. Lo que sí queda cada vez más claro es que lo que se avecina es un monopolio electoral como el que disfrutó durante décadas el PRI, y la explicación es tan simple como que la 4T consistía en regresar al funcionamiento del tricolor durante tanto tiempo. Hablaremos después de ello.
 
Antes, y a colación del “Top of mind” de acontecimientos, hay que comentar que está muy en sintonía con la realidad de la nación: violencia, preocupación, y algo de crónica rosa en cuanto a la boda del recién defenestrado Nieto. Lozoya también aparece, porque sigue buscando a quién delatar y sobre todo cómo, aunque no parece que encuentre aún argumentos que le sirvan para librarla. En menor medida, se menciona lo que el lunes aún era una expectativa sobre el discurso de AMLO en la ONU. Ahora ya es una (triste) realidad. El resumen lo tienen en la revolcada que le proporcionó al ufano Andrés Manuel el representante ruso: resulta que la paz y el desarrollo no van de la mano, y en todo caso, las amables propuestas de López mejor hacerlas donde corresponda, que no es desde luego el Consejo de Seguridad. Ridículo internacional para la política de abrazos y también, por cierto, para el responsable último de la política exterior, que es Marcelo Ebrard. Ahí viene el “sucesor”.
 
La realidad del país la perfilan no los abrazos, sino la caída de la producción industrial, el desabasto de medicamentos (que AMLO reconoce y endosa el Secretario de Salud, como si fuera alguien ajeno a su gobierno), la preocupante contracción de la clase media, que se aferra al clavo ardiendo de Marcelo, y por supuesto la violencia y la inseguridad sin control. Sin embargo, Andrés sigue empeñado en mezclar realidad y fantasía. Hace pocos días Emiliano Monge describía tal situación en “El País”, con un concepto que a buen seguro va a gustar al Dr. Salvador Borrego. Andrés Manuel y la realidad, en cualquiera de sus términos, tienen un comportamiento asintótico. Para los profanos, simplificando mucho: la realidad y AMLO son dos líneas que se acercan entre sí pero están condenadas eternamente a nunca alcanzarse.
 
Al margen de términos matemáticos, lo que decíamos es que la política de la 4T está protagonizando un regreso a lo que hace años la socióloga Brachet-Márquez denominó “Pacto de dominación”. México lo que tiene es un problema estructural: se ha sustituido el desarrollo del Estado y las instituciones, que debería dar lugar a un pacto entre aquél y los ciudadanos basado en los derechos y las obligaciones, por un simple intercambio de reciprocidades a través de redes clientelares. Dicho de otro modo: te doy prebendas a cambio de tu voto, y de eso se encargará mi inmensa tela de araña de intermediarios. Así funcionó el PRI durante muchos años, y así de mal le ha ido con la opinión pública a aquellos gobernantes que han intentado variar ese statu quo. No es necesario que mencione quiénes son, pero es fácil de deducir que los intermediarios de esas redes clientelares no pueden tolerar tales reformas. Llámense fiscales, llámense educativas, o llámense sindicales.
 
Quien no quiera ver y entender esto, allá su problema. Quien no reconozca la relación directamente proporcional entre el reparto de apoyos sociales y la aprobación a Andrés Manuel, y a su vez entre esto y la perpetuación de la pobreza como base de la continuidad en el poder, allá también, pues no hay más ciego que el que no quiere ver. Llegó Paco Ignacio Taibo a decirnos que había descubierto el hilo negro, pero el problema no es que nos la metan doblada, es que no hay manera de sacársela desde hace mucho tiempo. Y cada vez que alguien lo intenta, se molestan los de siempre. Ya lo tengo dicho muchas veces: el regreso de los mismos perros con distinto collar. Acudan a las gráficas de SABA para comprobarlo, tienen la ventaja de que son públicas. La justicia redistributiva, el crecimiento y los contrapesos democráticos, por un lado, y por otro el enorme e ineficaz agujero negro del aparato burocrático de un Estado que se confunde con el gobierno, son líneas asíntotas condenadas a nunca encontrarse. Así será hasta el infinito, mientras no se ataje la raíz del mal.

adolcafe@yahoo.es



ADOLFO GONZÁLEZ reside en España, y es analista político especializado en la interpretación de la metodología de Saba Consultores de medición de la opinión pública.

Las opiniones expresadas por el autor no reflejan necesariamente el punto de vista de MOBILNEWS.MX

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