Como suele suceder en estos casos, al buscar entre mis documentos personales un papel, encontr茅 otro del cual ya ni me acordaba: mi vieja credencial de elector, la primera que tuve al cumplir mis tiernos 18 a帽os.
La pongo mis manos y me llena de nostalgia. Recuerdo la emoci贸n que sent铆 entonces al contar con el documento que me acreditaba como ciudadano: un sentimiento equivalente al paso de la adolescencia a la hombr铆a.
Al instante, otro rayo me cruz贸: 隆la voy a volver a usar! S铆, tal cual viene, por ejemplo, sin foto ni mayor protecci贸n que la del papel similar al de cheques y pagar茅s y ninguna salvaguarda.
驴Por qu茅 la voy a usar de nuevo? Las propuestas de reformas a la legislaci贸n electoral enviadas por el presidente L贸pez Obrador, 鈥渞eforma electoral鈥 que considero un 鈥渉urac谩n electoral鈥 por su elevado poder destructivo, al devolver el manejo de las elecciones al 谩mbito del gobierno, apuntan hacia la degradaci贸n de la seguridad y confiabilidad en el manejo de las elecciones y a la depreciaci贸n de los documentos de identificaci贸n.
Entre mi vieja credencial de elector y la que porto hoy, expedida por el Instituto Nacional Electoral, hay un abismo de diferencia que tiene una raz贸n de ser: se refleja en esa peque帽a credencial de pl谩stico ultra protegida contra alteraciones y fraudes, el largo y tortuoso avance de la legislaci贸n y la cultura electoral en M茅xico, una lucha ciudadana que nos ha colocado entre los pa铆ses con elecciones m谩s seguras en el mundo.
No hay m谩s que leer a acad茅micos, columnistas y la opini贸n de la Comisi贸n Venecia (de El Consejo de Europa) en donde establece su an谩lisis sobre las reformas a 17 art铆culos constitucionales propuestas por el presidente L贸pez Obrador, para darse cuenta de la profundidad e irracionalidad de ese intento de liquidar el sistema electoral actual (INE incluido) para, de sus ruinas, construir uno nuevo bajo su control absoluto.
Pero vuelvo a mi primera credencial de elector. Nada m谩s consideren esto, por favor:
1. Fue expedida el 28 de abril de 1979 por el Registro Nacional de Electores dependiente de la Comisi贸n Federal Electora, a su vez dependiente de la Secretar铆a de Gobernaci贸n. En esa 茅poca, las elecciones las realizaba dicha Comisi贸n gubernamental y las revisaba el Congreso de la Uni贸n (de mayor铆a priista) erigido en Colegio Electoral. Actualmente, el Registro Federal de Electores es parte de la estructura aut贸noma del INE, quien revisa el c贸mputo. Otros 贸rganos aut贸nomos, el Tribunal de Justicia Electoral de la Federaci贸n y los Tribunales Electorales estatales, conocen y resuelven las disputas judiciales electorales.
2. La firma y la huella digital, datos de nacimiento, ocupaci贸n (estudiante) y domicilio en la Ciudad de M茅xico y la pregunta sobre si sab铆a leer, eran lo 煤nico que se asentaban en la boleta. No llevaba fotograf铆a, te acreditabas en la casilla con la credencial que tuvieras a la mano. Si, as铆 era mi vieja credencial para votar. La veo hoy muy vulnerable a alteraciones y usos fraudulentos. Nada, absolutamente nada que ver con la credencial de elector del INE y sus protocolos de seguridad. Seg煤n recuerdo, no serv铆a para otra cosa que no fuera ir a votar.
3. Al reverso, en una columna se enlistaban los a帽os de las elecciones federales (desde 1967 hasta 1991); en otra m谩s, se registraban las estatales y municipales. Un sello peque帽o daba cuenta de las votaciones, pero no era dif铆cil de borrar. En esa 茅poca, los fraudes electorales se hac铆an no tanto con las credenciales, sino directamente en las urnas: robadas, rellenadas, manipuladas en el conteo, etc茅tera.
En esos 43 a帽os transcurridos desde mi primera credencial de elector hasta la actual, no es s贸lo la forma, la utilidad y la seguridad de la credencial lo que ha cambiado.
Lenta y penosamente, con el trabajo y las vidas de muchos mexicanos valientes, se construy贸 un sistema electoral independiente del gobierno, con un IFE/INE s贸lido y profesional y los tribunales electorales, con base en un sistema mixto de representaci贸n directa y proporcional y que sirve como dique a las pasiones y barbaridades de los partidos pol铆ticos y al autoritarismo.
驴Se va a borrar lo construido para poner en su lugar un sistema electoral bajo el cual ya vivimos, controlado por el gobierno y un partido dominante?
Conservo con cari帽o nost谩lgico mi vieja credencial de elector; nunca imagin茅 que volver铆a a usarla al retroceder cuatro d茅cadas las elecciones en M茅xico.
Digo no al hurac谩n electoral. Defendamos al INE.