
EFE
Washington, 12 Sep.- El Gobierno de Estados Unidos propuso este viernes que las empresas industriales del país no emitan informes sobre emisión de gases de efecto invernadero, por considerar que sería un "ahorro" sustancial y centrar el gasto en "cumplir beneficios ambientales tangibles".
La medida fue propuesta por la Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por sus siglas en inglés), la que asegura que eliminar este requisito de control será un ahorro de 2.400 millones de dólares para la industria estadounidense, que incluye a refinadoras de petroleo y centrales eléctricas.
"El Programa de Informes de Gases de Efecto Invernadero no es más que un trámite burocrático que no hace nada para mejorar la calidad del aire", dijo el administrador de la EPA, Lee Zeldin, en un comunicado publicado en la página oficial de la agencia.
En la actualidad, 8.000 instalaciones industriales están obligadas a informar sobre sus emisiones pero desde marzo de 2025, la Administración Trump inició un giro de política para revertir este tipo de medidas de control.
La política de control está vigente desde 2010 y proporciona datos clave sobre emisiones de grandes fuentes, proveedores y puntos de inyección de CO₂. Es la base estadística para diseñar políticas climáticas y verificar compromisos internacionales.
La nueva propuesta de la EPA está sujeta a un período de cometarios públicos donde podrá ser objetada o recibir observaciones para que no se oficialice o sea modificada antes de entrar en vigor.
En 2024, el sector industrial de Estados Unidos emitió el 22,9 % de gases del total nacional, de acuerdo con EPA y a nivel global representa el 6,5 % del total, aunque su actividad descendió ese año un 1,8 % debido a la disminución de la producción manufacturera y una disminución de la actividad minera de carbón.
La intención de Trump de liberar a la industria de estos informes forma parte de una agenda completa en el campo medioambiental que se une a otras medidas como retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París y otros compromisos internacionales, así como la propuesta de revertir normas de conservación de tierras públicas.