EFE
México, 15 Ene.- El Gobierno mexicano defendió este viernes su polÃtica energética tras una carta de varios ministros de Estados Unidos en la que se acusa al Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de "dañar el clima de inversión" por restringir la participación privada.
"La relación con Estados Unidos dentro del T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) en materia de energÃa es de respeto a las normas constitucionales de cada paÃs, asà quedó especificado en el tratado", argumentó RocÃo Nahle, titular de la SecretarÃa de EnergÃa (Sener).
Esta declaración ocurre después de que Washington criticó el compromiso de México con el nuevo acuerdo comercial en una carta enviada el 11 de enero y difundida este viernes firmada por los secretarios de Estado, Mike Pompeo; de EnergÃa, Dan Brouillette, y de Comercio, Wilbur Ross.
El inusual texto, enviado una semana antes del cambio de Administración de Estados Unidos, está dirigido a Nahle y a los secretarios mexicanos de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y de EconomÃa, Tatiana Clouthier.
La carta constituye una significativa llamada de atención al Gobierno mexicano por su controvertida polÃtica energética que afecta a las inversiones de empresas de Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea al restringir sus planes e inversiones.
Las ostensibles diferencias del Gobierno del presidente Donald Trump con México en materia energética se verán ademas incrementadas con la nueva Administración del demócrata Joe Biden, quien tiene un enfoque totalmente distinto a López Obrador en materia de polÃtica energética.
Mientras Biden apuesta decididamente por las energÃas renovables, el Gobierno de López Obrador defiende el petróleo y el carbón para favorecer a la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y la empresa pública de la Comisión Federal de Electricidad.
"Las recientes acciones regulatorias del Gobierno de México han creado una significativa incertidumbre sobre el proceso regulatorio de México, especialmente en el sector energético, y han dañado el clima de inversión en conjunto", escriben los secretarios estadounidenses.
El presidente López Obrador ha presumido del T-MEC, en vigor desde el 1 de julio, como la principal herramienta de México para reactivar la economÃa, que se contrajo al menos un 8 % en 2020, según estima la SecretarÃa de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Pero al mismo tiempo ha afirmado que México protegió su soberanÃa energética, por lo que puede continuar con sus cambios que protegen de la competencia a las empresas del Estado, Pemex y la CFE.
"En el marco de sus atribuciones, el Gobierno de México implementa un adecuado balance energético dentro del territorio nacional", sostuvo este viernes la titular de Sener.
Entre los reclamos en la carta, Washington destacó que los reguladores han recibido presuntas presiones para bloquear permisos para proyectos energéticos del sector privado y usar su autoridad para favorecer a las empresas del Estado.
Los secretarios estadounidenses denunciaron que ello afectarÃa "de manera adversa" cientos de millones de dólares de inversión.
"Aunque respetamos el derecho soberano de México de determinar sus propias polÃticas energéticas, estamos obligados a insistir que México debe respetar sus obligaciones bajo el T-MEC", establece el texto.
Empresarios del sector energético reconocieron que el T-MEC incluye un nuevo capÃtulo 8 de "Reconocimiento de la propiedad, directa, inalienable e imprescindible del Estado mexicano sobre hidrocarburos".
Pero advirtieron que existen otros capÃtulos de acceso a mercados, protección de inversiones, buenas prácticas regulatorias, y empresas del Estado que obligan a México a no dar un trato discriminatorio y garantizar la autonomÃa de los reguladores.
"Una de las cosas a considerar es que los socios de México en el T-MEC podrÃan objetar una renegociación de ese tratado", observó Ramsés Pech, socio fundador de la consultora energética Caraiva y Asociados, en un documento enviado a Efe.