Portland, Maine.- Donald Trump sabe que sus niveles de popularidad a煤n no son lo suficientemente s贸lidos como para sentirse seguro de ser reelecto en 2020. De ah铆 su doble apuesta: mantener el dinamismo de la econom铆a y alimentar la pol茅mica que le permita dividir a la sociedad.
El primer eje de su estrategia se centra en los buenos resultados econ贸micos, sustentados en un crecimiento sostenido del PIB, con 2.1% en el segundo trimestre de este a帽o, por encima de las previsiones de los analistas que ubicaban el aumento en 1.8%. Dos argumentos m谩s permiten al controvertido Presidente ser optimista: la inflaci贸n por debajo de 2%, dentro de los rangos establecidos por la Reserva Federal (Fed), y un nivel de desempleo de 3.7%, nunca antes visto en este pa铆s desde los a帽os sesenta.
De gran ayuda ser谩 la reciente decisi贸n del banco central de reducir las tasas de inter茅s en un cuarto de punto. Con esta medida, la principal econom铆a del orbe recibi贸 un impulso para mantener su dinamismo frente a la desaceleraci贸n global y las disputas comerciales con China.
En t茅rminos de aceptaci贸n, Donald Trump a煤n tiene retos que vencer. De acuerdo a un sondeo elaborado por Ipsos, el actual mandatario cuenta con una tasa de aprobaci贸n de 41%, bastante aceptable para un l铆der que ha enfrentado a cuanto sector se le ha puesto enfrente. La situaci贸n contrasta en las bases republicanas, en donde estos niveles se ubican en 72%.
Consolidado el voto duro republicano, la apuesta se centra en dividir al electorado dem贸crata e ir a la caza de un importante sector de la clase media, aquellos ciudadanos norteamericanos de raza blanca, que no cuentan con educaci贸n universitaria y que representan la capa poblacional m谩s receptiva de las propuestas de Donald Trump.
Hasta ahora, Trump ha sabido desestabilizar a sus contrincantes. Una agresiva ofensiva en contra de quienes, en el Partido Dem贸crata, se han denominado 鈥渟ocialistas democr谩ticos鈥 ha venido a atizar el discurso racista, generar desequilibrios en la oposici贸n y convencer que la verdadera apuesta se encuentra en la continuidad. En sus recientes tuits en contra de un pu帽ado de legisladoras de color, a quienes sugiri贸 regresar a sus pa铆ses de origen y 鈥渞eparar esos lugares infestados de criminales de los que vienen鈥, el mandatario abre sus cartas: la b煤squeda del electorado blanco.
Trump ha sido muy eficaz en revivir el discurso antiinmigrante, promover el proteccionismo comercial, confrontar a las 茅lites y victimizarse ante cualquier ataque. Todo ello forma parte de una estrategia que podr铆a permitirle alcanzar la reelecci贸n, ahora con un nuevo componente, que es el del discurso racista dentro de un pa铆s en el que este debate parec铆a haber sido superado. Al menos en las formas.
Segundo tercio. Finalmente fue ratificado el nuevo embajador de Estados Unidos en M茅xico, Christopher Landau. La decisi贸n de la C谩mara alta ocurre a s贸lo un d铆a de que inicie el periodo vacacional en ese 贸rgano legislativo. Era una muy mala se帽al para nuestro pa铆s no tener un representante de la Casa Blanca.
Tercer tercio. Podr铆a fortalecerse la alianza Trump-Bolsonaro si Estados Unidos concreta lo que hasta hoy es un proyecto: la negociaci贸n de un acuerdo de libre comercio con Brasil.
